IDENTIDAD SOCIAL EN EL DEPORTE

El concepto de identidad ha existido siempre, y va desde lo personal a lo social. En el extremo  personal se dan unas características bien diferenciadas de la personalidad, y además cualidades observables que nos definen a uno mismo. En el otro extremo social, la identidad se caracteriza por como una persona se adapta  a un grupo social; por ejemplo a un equipo deportivo, un estilo musical, etc.

Identidad social en el deporte, la podemos definir como <<aquella parte que uno tiene del concepto de uno mismo derivada de su conocimiento de pertenencia a un grupo, equipo… junto con el valor y la importancia emocional que va unida a dicha pertenencia>>, tanto como deportista o aficionado.

     La identidad social en un contexto deportivo, hace que los deportistas estén motivados por mantener un concepto positivo de si mismos, y por lo tanto se acerquen estratégicamente al grupo/equipo o se distancien del mismo. Qué quiere decir esto: que se adaptan preferiblemente a los grupos mejor considerados positivamente, y se distancian de los grupos menos valorados.

     En qué nos beneficia esto como deportistas

La identificación con el equipo se ha asociado con muchas ventajas relacionadas con la salud, como: mayor bienestar y autoestima personal, mejora del estado de ánimo, mayor vitalidad,  menos niveles de fatiga y afecto negativo, mejor experiencia de emociones positivas, <<quién no ha vibrado en un estadio cuando ganas o gana tu equipo o deportista favorito>>, en definitiva, mayor nivel de satisfacción de uno mismo.

Aplicación y práctica en un contexto deportivo.

Los entrenadores, técnicos deportivos… juegan un papel importante para favorecer la identidad del grupo/equipo. En concreto en la percepción de imparcialidad y apoyo por parte del técnico, tiene una función importante en el desarrollo de la identificación de los deportistas con su grupo/equipo.

Entonces, la identidad social tiene implicaciones importes en la práctica deportiva; por ejemplo: un instructor de fitness y quienes lo practican. Los deportistas que desarrollan una identidad social fuerte con sus compañeros de grupo/equipo, tienden a participar más en las clases, en los entrenamientos completando los ejercicios, respetando horarios, etc. que aquellos que se identifican menos con el grupo/equipo.

 

Hay muchos factores que pueden no influir en la identificación con el grupo/equipo, como la edad, el peso, nivel deportivo, etc. Esta es la mala noticia, la buena que hay estrategias para trabajar la identidad con el grupo/equipo. 

Dados los efectos positivos de la identidad social en el deporte, los entrenadores, técnicos, dirección deportiva, etc. deben esforzarse por establecer una identidad social fuerte en el grupo que se verá acentuada en la unidad de equipo. Hay estrategias para conseguirlo, como, dar nombre al grupo/equipo con el sentido de nosotros, utilizar un estilo de ropa y color que caracterice al equipo, crear un mantra, salidas sociales, etc.

Carlos Otero Coach

 Hoy quiero dedicar  mi  entrada en el blog 

Al Club «Cazafantasmas Team«, club del que me siento agradecido y orgulloso de formar parte.